
Viajar a Argentina | Guía práctica y consejos
¿Has escuchado que Argentina es un país caro dentro de su región?
La realidad es que esto estará atado a dos factores principales: tu estilo de viaje y la ruta que escojas. De a poco iremos desgranando estos tópicos y entenderás porque puntualizo estas dos temáticas para, luego, al final de la publicación, poder elaborar tu propia estrategia de hospedaje para viajar por Argentina.
Antes de empezar, es importante destacar que los precios en el país han subido drásticamente y el concepto de “Argentina barata” con la que el turismo se vinculaba, ya es historia. Con esto dicho, en esta publicación analizaremos la variable hospedaje para ver como se conformará el cálculo de nuestro presupuesto para viajar por Argentina…
Hospedaje en Argentina
Dentro de todas estas nuevas revoluciones, el conseguir un hospedaje durante nuestro recorrido viajero se ha vuelto sumamente interesante. Por otro lado, tiende a ser una de las opciones del presupuesto que más temor abarca…
¿Será seguro?… ¿conseguiré donde dormir en aquel pueblo?…
Todos los viajeros pasamos por una primera etapa de procesamiento y búsqueda de coraje para enfrentar lo desconocido. En definitiva, es parte de la esencia del ser explorador.
Por este motivo, y para incentivar el combustible del viajero independiente, me gustaría presentar una serie de estrategias viajeras vinculadas al hospedaje que van más allá de los lugares tradicionales (Hoteles/Booking/Airbnb). Las mismas las fui puliendo a cada paso para, finalmente, hoy integrarlas en mi sendero naturalizado.
Opción #1: Couchsurfing en Argentina
Está red social fundada en las bases tecnológicas del Siglo XXI busca conectar viajeros a través del intercambio de hospedajes. Su metodología consiste en habilitar ese espacio extra que hay en nuestras casas y publicarlo para alojar por un tiempo – generalmente corto – a algún viajero de manera “gratuita”.
Pongo el término “gratuito” entre comillas porque se busca que haya un intercambio desde el perfil de lo que “puede aportar el viajero” en su estancia y el lazo social de hospedar a esa persona si luego visita tu país. Un intercambio equivalente que no refleja el solo hecho de tener alquilado un techo a costo $0.

Opción #2: Acampar en Argentina
¡Larga vida al antiquísimo hospedaje móvil: la carpa!
Dos kilos que viajan acarreados en la mochila y que pueden convertirse en tu pequeño refugio en cuestión de minutos. Además, es el único que te permite acceder a paisajes naturales galácticos – y déjame decirte que en el país hay mucho de esto -.
Más allá de las áreas naturales protegidas, podemos encontrar un montón de zonas habilitadas para acampar – incluido algunas gratuitas -. Estos lugares se los conoce como “campings” o “zona de acampe”. A diferencia de otros países, se pueden encontrar muchas opciones desarrolladas a lo largo del país y casi siempre encontrarás alguno en donde anclar tu espíritu.
Opción #3: Hostels en Argentina
En Argentina amamos los hostels.
No hay ciudad/pueblo relativamente conocido que no ofrezca uno. Además, solemos darle un toque distintivo transformando lugares impensados, como la historia de esta antigua estación de ferrocarril que encontré por Mendoza:
Estos refugios que comúnmente se los vincula con los jóvenes viajeros, suelen atraer la demanda entre personas de 20-40 años, sin embargo, eso no quita que sea una opción viable para otras edades.
Si esto fuera así, que hubiera sido de la vida del alemán de 60 años con el que compartí cuarto en un hostel de la provincia de Salta, quien encantando por los valles, se aventuró a viajar en motocicleta por las alturas del noroeste argentino.
Si te gusta compartir momentos con otros viajeros, el hostel será tu lugar. Los precios de los mismos son bastante económicos bajo la estricta regla matématica: mientras más gente en el cuarto, más barata la noche.
Muy lindo lo de los hostels pero… ¿En donde los busco?
Bueno, como primera instancia te aconsejaría que ataques directamente desde el ojo satélital de Google Maps. Dentro de la ciudad/pueblo que tengas planeado ir, te aparecerán iconos de hospedaje referidas a hostels y la información de contacto hacia ellos.
Otra opción es realizar una caminata de exploración al llegar a un nuevo destino. Esto nos permite ver el espacio en directo y visualizar si nos interesaría quedarnos ahí. El único riesgo de esto es que si nos encontramos en un lugar turístico en plena temporada alta, puede que todo esté ocupado y se nos dificulte encontrar una cama.
Opción #4: Voluntariados en Argentina
El intercambio de trabajo por hospedaje ha ido creciendo mucho en los últimos años, permitiéndole a muchos viajeros costear parte de sus trayectos a través de este contrato de palabra. Por ejemplo, utilizando el punto anterior, muchos hostels aceptan ofrecerte hospedaje y desayuno – depende del lugar – a cambio de algunas horas de trabajo en el que te puede tocar atender al público, hacer el desayuno o preparar los cuartos. Esto va a depender de lo que arregles con el dueño del mismo – una consulta previa nunca viene mal -.
Como verán, alternativas para construir nuestra propia aventura no faltan. En definitiva, las personas con las que compartiremos un techo o una comida son las que añaden ese condimento diferencial a nuestra historia de ruta.